Los problemas de espalda pueden tener distintos orígenes: desde malas posturas durante el día hasta esfuerzos en el trabajo, pasando por el uso de un colchón inadecuado en nuestro descanso.
Los colchones para problemas de espalda deben cumplir una serie de características para que nos ayuden a aliviar el dolor de nuestro cuerpo. Para empezar, la firmeza debe ser media, ni muy blando ni muy duro, de manera que la superficie pueda adaptarse a la curvatura de la espalda. Por lo general, el colchón debería tener un refuerzo en la zona donde esté el problema, por ejemplo, a la altura de las lumbares si es ahí donde más problemas de espalda tenemos.
Hoy en día hay una gran variedad de colchones entre los que podemos elegir: de látex, viscoelástico, de pluma, espuma… Los expertos suelen recomendar el colchón viscoelástico porque es el que reúne las características anteriores. Sin embargo, lo fundamental es que estemos cómodos, ¡nuestra salud lo agradecerá!
Si estás buscando un colchón de calidad pero necesitas consejo para decantarte por uno, en este artículo te mostramos una breve guía sobre los principales aspectos a tener en cuenta para elegir el colchón perfecto.
